Aquella imagen que pocas veces había visto en fotos de mi
padre.
Vagos recuerdos llegaban a mi mente, la recordaba con cariño
sin siquiera conocerla. Sin sospecha alguna, salude amablemente. Rodrigo apareció
en la escena inesperadamente. Me invito a pasar y pude ver la grandiosa decoración
de su casa. Las paredes tapizaban murales impresionantes, expresaban una
cultura extraña para mis conocimientos, por doquier, plantas estrechaban mi
camino. La comida estaba lista, un banquete como nunca ante mis ojos se
asomaba.
Ximena, el nombre de la mujer que me había recibido. Su madre
me lo había contado Rodrigo, era extraña, tímida, de una presencia incalculable
aunque muy hermosa.
Mis ojos acaparaban a cada movimiento su silueta.
La conocía, muy dentro de mi lo sabia, su mirada trataba
claramente de evadirme, se dispersaba aceleradamente de lado a lado.
El anochecer se hacia notable, la hora de mi partida se
acercaba. Una confusión inmensa me atormentaba. Rodrigo platicaba, aunque mi ignorancia
era visible, no podía ponerle atención ante tantas dudas.
Decidí despedirme apresuradamente e ir a preguntarle a mi padre
sobre aquella mujer. Los taxis no me hacían parada, como si hubiera tanta
delincuencia en la Ciudad de México.
El metro mi única escapatoria, bajo la sombra de cada estación
mi cabeza daba vueltas, ¿ De donde conocía a aquella mujer?.
Llegando a casa busque insólitamente la imagen de mi padre,
no se encontraba. Sin remedio alguno, busque como loco desesperado aquellas
fotos que ninguna importancia reflejaban
en mi en época pasada.
Cajones, puertas, alacenas, bajo la cama, por cualquier rincón
de la casa las buscaba. Por fin ante mis ojos había quedado aquella caja que mi
padre preservaba muy bien escondida. Sin espera alguna la abrí, justo ahí estaba. En ellas se podía notar a mi padre junto a Ximena, lo impresionante
era que a mi lado se dejaba ver a otro niño.
2 o 3 años era mi edad me lo supongo, ¿ Que tenia que ver
ella conmigo?.
Dudas y preguntas mi persona se hacia, sentimientos y
tristezas me afligían. Esta noche ha sido confusa para mi ser.
Vaya tantas emociones y sentidos en un solo evento.
ResponderEliminarBuena entrada, conserva esa calma en el relato, no pierdas la paciencia, en este momento le has agregado algo importante y has dejado que la historia siga corriendo, buena elección no cortar la historia con el mismo personaje del principio, así se vuelve más interesante.
ATTE: GUILLERMO F